“EL VERSO SE ME VA”

Se me escurre el verso,

su magia se me va

quiero retener su vasto universo,

navegar por su ayer cuando

rompía mi silencio y

pasmaba

al  corazón.

Se retira de a poco

y ya no se nada de él

sólo deja su vacío polar,

 quiero retener  su basto universo

romper el reloj de su adiós,

me deja indefenso y mediocre.

Se diluye entre mi pena y la

otredad, delicado  a frágil

quiero retener su basto universo

romper los motivos de su ausencia

guardarlo en su manantial.

Agoniza, se rompe, cruje

y tambalea, se me escurre

viento de las manos, se aleja

rápido el verso.

Autor: Lucas Zurschmitten.

“EL MENSAJE DEL VIENTO”

        Ignacio disfruta de una fiesta londinense; qué fino y delicado lugar, piensa. Qué lejos quedó el calendario que indicaba la brújula.

        Toca con sus manos de hombre seguro, doctorado, culto e intelectual los objetos de la sala. La vasija rupestre le causa intriga ,  la acaricia, decide penetrar en ella con su vista. Quizás la fiesta, el vino o la música de quena que anuncia el mensaje del viento, no lo sé, no lo sabe, pero los cuerpos de estas magníficas mujeres danzan el ritual del amor, ¿Con quién se quedarán? El sonido las arrastrará hasta su hombre, ellas enlazarán sus piernas sometiéndose ante el poder sexual masculino, su líder. Ignacio siente asimilar el dolor de la pasión en sus manos, corre sangre en diminutas gotitas, levanta la mirada, deja el objeto, una mujer lo ha elegido.

       Ella se quita la máscara, le toma las manos, corre su vestido de fuego, alza su fina pierna y le dice :

                               -¡ Qué buen dejavú!-

                                                                          

                                                                                        

                                                                                                   Autora: Adriana Comán

Adriana Comán